La halitosis

La halitosis patológica es de evolución crónica y persiste a pesar de las técnicas de higiene oral. Es provocada por algunas alteraciones del metabolismo enzimático. Dentro de este grupo se incluyen causas como la periodontitis, más conocida como piorrea, la cetosis diabética, alteraciones renales y hepáticas, carcinomas y leucemias. Las dietas pobres en hidratos de carbono también pueden provocar halitosis. La ausencia de alimentos como pasta, patatas, pan, arroz, cereales y legumbres hace que el organismo comience a utilizar la grasa para obtener energía. En consecuencia aparece un aliento con olor pronunciado, debido a la eliminación de pequeñas cantidades de acetona.


En la mayoría de los casos el mal olor, ya sea de origen médico o dental, es real y puede ser fácilmente diagnosticado. La mayor parte de los casos de halitosis desaparecen al realizar una higiene bucodental adecuada, cepillando los dientes, encías y lengua después de cada comida, usando la seda dental y acudiendo al dentista con regularidad.


Si el mal olor persiste, se recomienda realizar un procedimiento de unos pocos minutos. Mediante un cromatógrafo de gases (el único instrumento que no sólo mide los niveles de compuestos volátiles de sulfuro, sino que es capaz de identificar cuál de ellos está más aumentado) se puede determinar el origen de la afección y establecer un tratamiento individualizado.

Etiquetas: periodontitis, dental, halitosis, aliento, piorrea

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